Hay quien lo llama ‘revolución’, otros prefieren definirlo como ‘evolución’. Sea como fuere, la fuerte transformación que vive el sector bancario impulsada por la entrada en vigor en noviembre de 2018 de la directiva europea sobre servicios de pago digitales PSD2, lleva aparejada un cambio en los perfiles profesionales que demanda la industria.
Los sistemas de banca abierta permiten interconectar las finanzas de ciudadanos y empresas, así como crear una miríada de aplicaciones nuevas basadas en estándares comunes fácilmente interoperables.
Hace unas semanas participamos en el World Open Banking Dialogue en Londres. Allí pudimos conocer de primera mano lo que está aportando la banca en todo el mundo a la consolidación del open banking y también tuvimos la oportunidad de ofrecer la visión del BBVA al respecto.
El lema del evento fue ‘The New API Stack for the Programmable Society’. Bajo el nombre ‘The BBVA API_Market Open Banking experience’ nuestro workshop giró en torno al cambio que está suponiendo el open banking para los clientes minoristas y los negocios, desempeñando un papel definitivo en la transformación financiera.
Dicen de 2018 que ha sido el año del open banking. Y de 2019 que será el que lo asiente. A punto de cumplir doce meses de la entrada en vigor de la directiva europea PSD2 en marzo pasado, la noción de banca abierta tiene ante sí el reto de transitar 2019 bien como una evolución bien como una revolución. La oportunidad es inmensa, la colaboración es esencial y la confianza es la clave, pero se necesitará incentivar al cliente para que la abrace.
El sector bancario se ha sumado ya a la revolución digital a través de las APIs abiertas. La publicación especializada “The Banker” hace un repaso de la evolución del proceso y sus protagonistas en los últimos años, entre los cuales destaca BBVA API Market.
El uso del Big Data ya supone un importante valor añadido a una amplia gama de sectores, desde el bancario hasta el retail.
El open banking está transformando la forma de entender las finanzas, una revolución que abre la puerta a un mundo de colaboración y oportunidades, generando valor para los clientes y nuevos modelo de negocio. “El open banking va a mejorar la vida de las personas. Las digitales y las no tan digitales”, explicaba recientemente Ricardo Segoviano, Head of BBVA API Market.
Hay un debate extendido desde hace años en la comunidad de desarrollo financiero. Las plataformas abiertas de operación de datos, las API de open banking, ofrecen una tabula rasa que pone al mismo nivel de entrada a grandes entidades y pequeñas startups. La banca abierta "va a ser el mayor cambio tectónico en los servicios financieros desde la creación de la banca online", según Dankse Bank.
En los últimos años, Reino Unido se ha convertido en uno de los abanderados del open banking a nivel mundial. Comenzó con la decisión del Ministerio de Hacienda británico de crear un grupo de trabajo sobre el tema en 2015; después, hace año y medio, se creó una entidad para gestionar la transición; y el pasado 13 de enero se produjo ya la implementación de estándares que ponen al país a la cabeza en banca abierta.
